Me quedo con el color Azul Mar y con el verso que me viene de cuando en cuando... Josefina Manresa en la piel de Rosario Pardo o Rosario Pardo en los huesos de Josefina Manresa y en la precariedad de una humilde casa de modista, donde unas veces pagan, otras pagan cuando pueden y otras no vienen a por el encargo.
Tercer día de muestra, en un ejercicio infinito de belleza y palabra, así fue como Rosario Pardo y su interpretación de la viuda de Miguel Hernández nos inundo el corazón de un sentimiento de tristeza por eso que narra y de alegría, la necesaria para disfrutar de la belleza del instante, de una noche en la que el Regio y Villanueva del Arzobispo hicieron suyo el texto poético y sublime de Alberto Conejero, la dirección de Chema del Barco y la clase magistral de interpretación de Rosario Pardo.
Una noche que los más de 200 espectadores tardaremos en olvidar y que nos mostró una obra de belleza sencilla, de verso o prosa de la que agarra en los adentros y que nos contó la memoria de una mujer, una sombra del poeta, la sombra que quiso amarlo porque al menos tuvimos amor entre tanta penuria.
... y una noche, la tercera consecutiva de muestra en la que el comportamiento del público villanovense fue de nota alta, de la más alta y en la que su aplauso, silencio, emoción y cultura teatral se hicieron sentir entre las paredes de la casa de Josefina.